El hilo invisible
Tener ideas, plantear objetivos y hacernos propósitos es de alguna forma la parte más sencilla, ya que, aunque requiere de análisis, evaluaciones y ser honesto con uno mismo, el verdadero reto inicia cuando tenemos que pasar de la teoría a la acción y descubrir nuestro hilo invisible del logro.
Puede ser que para la mayoría de nosotros exista justamente un hilo invisible que une los pensamientos con los actos; siempre está presente, aunque es más fácil encontrarlo en ciertas ocasiones, por ejemplo, la relación entre sentir hambre y comer es muy fácil de encontrar, no así la relación entre querer cambiar de trabajo y de hecho salir a buscarlo.
Para muchas personas dar este salto deriva en una parálisis difícil de superar, la cual puede suceder por múltiples razones, por ejemplo, no sentirse capaz de lograr resultados, desesperación porque los cambios no suceden de forma inmediata, e incluso miedo al cambio.
Descubre tu hilo invisible
Todas estas reacciones son válidas, sin embargo, el verdadero valor está en transformar las emociones derivadas de esta parálisis; en la energía necesaria para llevar a cabo las acciones que nos acerquen a los objetivos que tanto trabajo nos costó plantear.
¿Qué hacer para superar la parálisis?
- Encuentra tu motivación, ya tienes lo objetivos, ahora piensa ¿cuál es el verdadero motivo porque el que quieres realizar los cambios?
- Realiza acciones pequeñas, por ejemplo, si tu objetivo es realizar un emprendimiento, presenta a pequeños grupos de personas tu idea, escucha retroalimentación, y prepárate para verdaderos inversionistas.
- Acciona en cadena: siempre que planees la acción con la que darás el primer paso piensa cual será la segunda, pero cuidado, no pienses en la segunda, tercera cuarta y quinta; considera únicamente la acción inmediata siguiente para que sea menos abrumador.
- Registra los resultados, así sabrás si es necesario modificar tus objetivos.
Lo más importante es que realices pequeñas evaluaciones: en el momento en que dejas de actuar, además de la parálisis, revisa si por algún motivo estás perdiendo la motivación. Recuerda que cambiar de objetivo es válido, pero evalúa siempre si lo estás haciendo por frustración o porque realmente deseas cambiar de planes.
Una vez que encuentres tu hilo invisible será más sencillo conducir tus acciones en el camino que deseas; recuerda que los resultados se reflejarán poco a poco hasta que cumplas el objetivo que te planteaste.