Emprender algo nuevo no siempre es fácil, generalmente se presentan dudas e inseguridades, aunque también emoción por lo que viene. El motivo del cambio puede ser diverso, por ejemplo: puede ser motivado por propia decisión, o bien, porque estamos en una situación en la que no tenemos otra alternativa.
¿Cómo hacer para que los cambios sean más sencillos? Lo mejor es preguntarnos ¿Qué motiva este cambio? ¿Qué me inspira a cambiar?
Estas preguntas tienen respuestas diferentes, el motivador para el cambio puede ser por ejemplo:
- Quiero un mejor puesto
- Ha llegado el momento de mi jubilación
- Me quedé sin trabajo
- Quiero cambiar de carrera
Pero lo que nos inspira a cambiar es dónde se va a fundar el cambio, es decir, es posible que nuestro motivador sea obligado o elegido, pero si no tenemos la voluntad suficiente para hacerlo, todo queda en planes o en deseos de cómo quisiéramos que fueran las cosas.
Ahora que ya reconoces la situación en la que debes cambiar, podemos preguntarnos
- La mejor fuente de inspiración la tendrás en tus vivencias. Aquello que consideres tus triunfos o tus fracasos, es lo que te ayudará a conocer tus fortalezas, a afrontar situaciones difíciles, y hasta saber qué es lo que espera la gente de tu producto, servicio o incluso de tu actitud.
- El arte. Mirar cosas nuevas siempre nos inspira a hacer cosas nuevas, estimular tu cerebro con colores y sonidos -como acudir a un museo o a un concierto- te ayudará a disminuir tu estrés, pero también a encontrar respuestas.
- La lectura. Este hábito puede funcionar tanto si lees artículos especializados del tema que te interesa, como si eliges alguna lectura como pasatiempo, que te ayude a despejar tu mente y a imaginar.
- Casos de éxito. Busca casos en las que las personas han logrado el éxito. Generalmente pensamos en los grandes magnates, pero ¿te has preguntado como día a día logran el éxito las personas a tu alrededor? Para un niño pequeño pasar un día sin caerse puede ser un éxito, así que observa a tu alrededor cómo las personas logran sus objetivos día a día.
- Cambia tu entorno. Si buscas algo que te inspire a cambiar, podrías realizar cambios externos; algunas ocasiones hasta cambiar un sillón de lugar nos da una nueva perspectiva.
- Familiarizarte con la tecnología. Busca y experimenta con los avances más recientes; cuando menos lo imagines puedes encontrar una gran idea para utilizar la tecnología a tu favor.
- Otras disciplinas. Cuando no sabes cómo resolver un problema o te sientes estancado, voltea a ver a otras personas de cualquier área de conocimiento; puedes acercarte a ellas y hacerles preguntas como: desde la perspectiva de marketing ¿cómo se resuelve un problema en finanzas?, hasta ¿Cómo un entrenador de gimnasio logra que una persona se involucre y se comprometa con su rutina?
Algo muy importante que podrás notar como factor en común en cada una de las formas de buscar inspiración tiene que ver con estimular tu cerebro de formas diferentes; el realizar nuevas actividades siempre nos ayuda a mover nuestras ideas, pero también a separarnos por un momento de aquello que más nos preocupa, de manera que nos retiremos un momento, para realizar actividades que no tengan que ver con la cotidianidad.
Aplica estos tips y prepárate para afrontar cualquier cambio y encontrar nuevos caminos.